Ya todo está preparado para que nazca mi niña,
la casa reluce blanca de chupetes y mantillas.
Cuántos meses esperaron… cuántas preguntas hacían…
los varones ayudaban y hasta María Paz tejía.
¡Qué dichosa mi Mercedes! su papá cuanto la mima!
la sueña linda y traviesa y en las noches la acaricia.
Una luna más y llega, llora, sonríe, camina.
se disfraza, inventa cuentos y quiere ser bailarina.
Alguna vez un secreto me contara divertida
y entre risas y algún reto Mercedes será mi amiga.
Maggie, 1983.