Inteligencia conyugal

Ensayo y error, desilusión, vuelta a empezar, tiempos para gozar y también para sufrir, acertar, fallar, fallar varias veces por día, aprender los tiempos del otro, bancarse al otro, que lo banquen a uno, mejorar para que no tengan que bancarte, descubrir que sos cada día mejor persona mientras hay otro que se da cuenta de eso, admirar al otro y que lo sepa… esperar que vaya apareciendo el amor, hacerle lugar y priorizarlo reconociéndolo como algo logrado entre los dos, y mientras tanto, como cualquiera, sos vos mismo, sos fiel a tus convicciones, vas adonde se te ocurre, conservás tu libertad… todo eso no se pierde por convivir con alguien. Pero parece que ahora “tasa tasa cada uno a su casa”.

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